domingo, 28 de marzo de 2010

Beauvoir, Simone de&Sartre

Cuando la Beauvoir sabe de su muerte, quiso meterse en la cama con el cadáver

Sartre había nacido en París en 1905, y desde que conoció a Beauvoir en 1929 nunca más volvieron a separarse, al menos, espiritualmente; se convirtieron en una pareja con una sola cabeza, la complicidad tanto intelectual como afectiva determinaría sus vidas.
Cuando el grupo de Sartre acogió a la joven y prodigiosa estudiante (era mejor que Sartre tanto desde el punto de vista literario como filosófico) él le dijo: "A partir de ahora, estarás bajo mi ala". Y no se equivocó.


Sólo se produjo un distanciamiento entre ellos en los últimos siete años de vida del filósofo. Durante este tiempo, Sartre, que se había quedado ciego y que probablemente sufría el deterioro de su salud mental y la lucidez intelectual que había poseído, se fue alejando de Beauvoir. Poco a poco fueron prescindiendo el uno del otro; Sartre se hizo adepto a un grupo maoísta y adoptó una niña, Arlette.

Simone también adoptó a Sylvie, una chica treinta años menor que ella y que en 1990 se encargó de publicar post mortem sus cartas a Sartre y el controvertido Diario de guerra. Cuando Sartre murió, en 1980, Arlette estaba con él en el hospital. Simone, al conocer la noticia de la muerte de su eterno compañero, llegó corriendo hasta su lecho y quiso meterse en la cama con el cadáver.

Fuente: PAULA IZQUIERDO, Sexoadictas o amantes, Belacqva.

Comentarios